Todos, independientemente del trabajo que tengamos, estamos permanentemente vendiendo. Vendemos cuando queremos que nos contraten en una entrevista de trabajo, cuando buscamos pareja o amistad o cuando presentamos una idea que tenemos sobre un negocio o sobre el sitio al que queremos ir de vacaciones con nuestra familia o nuestro grupo de amigos. Vender no es una elección o una simple profesión; vender es una necesidad para todos y cada uno de nosotros. El éxito y la felicidad en la vida dependerá enormemente de la capacidad para vender nuestras ideas, servicios o productos. Las personas compramos, antes que el producto, a la persona que nos lo vende. Para generar confianza en el cliente el vendedor necesita, además de un conocimiento técnico del producto, una fuerte autoconfianza en sí mismo y toda una serie de habilidades relacionales o de comunicación que aporten credibilidad a la forma en la que despliegue sus argumentos de venta. Para ello, la Programación Neurolingüística nos ofrece un modelo útil y muy efectivo que el autor coach, consultor y Master Practitioner en PNL lleva varios años utilizando de forma absolutamente exitosa con los equipos de ventas con los que trabaja.