A todos los niños les encantan los días de nieve: ¿quién contiene las ganas de pisar la nieve y hacer muñecos? El niño de este cuento deberá aguantarse las ganas de salir corriendo de casa y esperar a que su abuelo se duche, se afeite, se abrigue... ¿Valdrá la pena la espera? La sorpresa final le enseña que hay cosas por las que vale la pena esperar.