Las aventuras de Sherlock Holmes fueron publicadas por primera vez en 1892, en un libro que reunió 12 relatos que habían aparecido previamente en la popular revista londinense The Strand Magazine. Al aparecer esta obra, el detective privado Sherlock Holmes ya era toda una celebridad para los lectores ingleses. A su oficina, ubicada en la legendaria Baker Street, llegaban excéntricos y desesperados clientes para pedir su ayuda. Todos ellos pudieron salir airosos de sus problemas gracias al agudo razonamiento y la audacia de Holmes. Conan Doyle, a través de este emblemático personaje, dio vida a un arquetipo de detective, que ha marcado una honda influiencia en toda la narrativa policial, vigente hasta nuestros días.
Sobre el autor
Conan Doyle, Arthur